Es nesesario correr riesgos. Solo entendemos del todo el milagro de la visa cuando dejamos que suceda lo inesperado. Todos los dios dios nos da, junto con el sol un momento en el que es posible cambiar todo lo que nos hace infelices. Todos los dias tratamos de fingir que no percibamos ese momento, que ese momento no existe, que hoy es igual que ayer y sera igual que mañana. Pero quien presta atencion a su dia, descubre el instante màgico. Puede estar escondido en la hora en que metemos la llave en la puerta por la mañana, en el instate del silencio despues del almuerzo, en la mil y unas cosas que nos parecen iguales. Ese momento existe: a travès de nosotros y nos permite hacer milagros.
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